Actualmente la peste es una enfermedad rara, pero puede ser mortal. Se transmite por las pulgas y está relacionado con la infestación de las ratas. Existen diferentes formas de la enfermedad, pero todas pueden conducir a la intoxicación de la sangre y a la muerte, aunque los antibióticos son eficaces contra la bacteria que la causa. Están disponibles vacunas para su uso por parte del personal de laboratorio que trabaja con la enfermedad; sin embargo, cuando los autores buscaron en la bibliografía no encontraron estudios de calidad suficiente para incluir en esta revisión. Por lo tanto, no se pueden tomar decisiones confiables sobre la eficacia o la tolerabilidad de cualquier vacuna contra la peste.
Leer el resumen científico
La peste es endémica en China, Mongolia, Birmania, Vietnam, Indonesia, la India, gran parte del África meridional, los Estados Unidos y América del Sur. Hay tres tipos de vacunas (viva atenuada, muerta y fracción F1) con diferentes formas de administración.
Objetivos
El objetivo de esta revisión fue evaluar los efectos de las vacunas para la prevenir la peste.
Métodos de búsqueda
Se hicieron búsquedas en MEDLINE (1966 hasta febrero de 2011), EMBASE (1985 hasta febrero de 2011), CENTRAL (The Cochrane Library 2011, número 2) y en las listas de referencias de los artículos. Se realizó una búsqueda manual en la revista "Vaccine" (hasta 1997) y se estableció contacto con expertos en el tema.
Criterios de selección
Ensayos aleatorizados que compararan vacunas vivas y muertas contra la peste con ninguna intervención, placebo, otras vacunas contra la peste o vacunas contra otras enfermedades (vacunas control).
Obtención y análisis de los datos
Tres autores de la revisión evaluaron la elegibilidad de los ensayos.
Resultados principales
No se incluyeron ensayos.
Conclusiones de los autores
No hay evidencia suficiente para evaluar la eficacia de alguna vacuna contra la peste o la eficacia relativa entre las vacunas y su tolerabilidad. Los datos circunstanciales de los estudios observacionales indican que los tipos muertos pueden ser más eficaces y tener menos efectos adversos que los tipos atenuados de vacunas. No parece haber evidencia de los efectos a largo plazo de ninguna vacuna contra la peste.
La traducción y edición de las revisiones Cochrane han sido realizadas bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad del Gobierno español. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con Infoglobal Suport, cochrane@infoglobal-suport.com.
