Hidratación médicamente asistida para ayudar a las personas que reciben cuidados paliativos

Pregunta de la revisión

¿Cuáles son los beneficios y riesgos de la administración médica de líquidos a adultos en la fase final de la enfermedad?

Mensajes clave

- No está claro si la administración de líquidos mediante un goteo en vena o bajo la piel, o a través de una sonda en el estómago en la fase final de la enfermedad mejora la calidad de vida (bienestar) en comparación con la atención estándar (buenos cuidados bucales para aliviar la sensación de sed) o el placebo. Un placebo es una "simulación" o tratamiento falso que tiene el mismo aspecto, pero contiene una cantidad de líquido no terapéutica.

- No está claro si la administración médica de líquidos aumenta la duración de la vida de las personas o si provoca efectos no deseados o perjudiciales.  

- Se necesitan más y mejores estudios para investigar la administración médica de líquidos a personas en la fase final de la enfermedad. Los estudios futuros deben centrarse en mejorar las pruebas para determinar si la administración médica de líquidos ayuda a las personas, y en averiguar cuándo empezar a administrar líquidos y cuánto líquido ayudará, si es que ayuda.

¿Por qué suplementar la ingesta de líquidos en la fase final de la enfermedad?

Los cuidados paliativos son el tratamiento, la atención y el apoyo que reciben las personas que viven con una enfermedad que acorta su vida. Los adultos que reciben cuidados paliativos pueden experimentar un menor deseo de líquidos orales a medida que se acercan al final de la vida. En este momento podrían desarrollar síntomas relacionados con la disminución de la ingesta de líquidos que podrían perjudicar su calidad de vida. Otra preocupación es que, sin líquidos suplementarios, su esperanza de vida podría verse disminuida por la posibilidad de morir a causa de complicaciones secundarias a una ingesta oral reducida y no a su enfermedad subyacente.

¿Qué se quiso averiguar?

Se quiso saber si los líquidos administrados médicamente ayudan a los adultos en la fase final de la enfermedad.

Hubo interés en el efecto de los líquidos administrados médicamente en cuanto a:

- la calidad de vida (bienestar) de las personas;

- cuánto tiempo vivieron; y

- el desarrollo de cualquier efecto no deseado o perjudicial.

¿Qué se hizo?

Se buscaron los estudios que investigaran si:

- los líquidos administrados médicamente en comparación con placebo con cantidades no terapéuticas de líquidos; o

- los líquidos administrados médicamente en comparación con la atención estándar, que incluye un buen cuidado de la boca para aliviar la sensación de sed

eran eficaces y si causaban efectos no deseados en adultos mayores de 18 años que recibían cuidados paliativos en la fase final de la enfermedad. 

Los resultados de estos estudios se compararon y resumieron, y la confianza en la evidencia se calificó según factores como la metodología y el tamaño de los estudios.

¿Qué se encontró?

Se incluyeron cuatro estudios con 422 personas. Dos estudios compararon los líquidos administrados médicamente con placebo, y dos compararon los líquidos administrados médicamente con la atención estándar. El estudio más grande se realizó en 200 personas y el más pequeño, en 42; los estudios duraron entre dos y 14 días. La edad de las personas que participaron en los estudios osciló entre los 28 y los 98 años, de las cuales 226 eran mujeres y 196 hombres. Los estudios se realizaron en países de todo el mundo, como el Reino Unido, EE. UU. y Argentina. Dos estudios se financiaron mediante becas de investigación clínica. No se encontraron estudios en los que las personas no tuvieran un diagnóstico de cáncer avanzado. 

Resultados principales

En adultos que reciben líquidos administrados médicamente en la fase final de la enfermedad, en comparación con placebo:

- no está claro si los líquidos administrados médicamente mejoran la calidad de vida;

- no está claro si los líquidos administrados médicamente aumentan la esperanza de vida ni si provocan efectos no deseados o perjudiciales.

En personas que reciben líquidos administrados médicamente en la fase final de la enfermedad, en comparación con la atención estándar:

- no está claro si los líquidos administrados médicamente mejoran la calidad de vida debido a la falta de información en los estudios incluidos;

- no está claro si los líquidos administrados médicamente aumentan el tiempo de vida de las personas ni si provocan la aparición de efectos no deseados o perjudiciales.

¿Cuáles son las limitaciones de la evidencia?

No existe confianza en la evidencia, y los resultados de estudios de investigación adicionales podrían diferir de los resultados de esta revisión. Tres factores principales disminuyeron la confianza en la evidencia. En primer lugar, la evidencia no abarca a todas las personas que interesaban, ya que solo se encontraron estudios que incluían a personas con cáncer avanzado. En segundo lugar, los estudios fueron muy pequeños y no hay suficientes para estar seguros de estos desenlaces. Por último, es posible que los participantes de los estudios supieran qué tratamiento estaban recibiendo, lo que podría haber introducido sesgo.  

¿Cuál es el grado de actualización de esta evidencia?

Esta revisión actualiza una revisión anterior. La evidencia está actualizada hasta noviembre de 2022.

Conclusiones de los autores: 

Desde la anterior actualización de esta revisión se ha encontrado un nuevo estudio. En los adultos que reciben cuidados paliativos en la fase final de su enfermedad, todavía no hay evidencia suficiente para determinar si la HMA mejora la CdV o prolonga la supervivencia, en comparación con el placebo o la atención estándar. Como todos los participantes fueron pacientes hospitalizados con cáncer avanzado al final de la vida, los hallazgos no son transferibles a los adultos que reciben cuidados paliativos en otros contextos, por enfermedades no oncológicas, demencia o neurodegenerativas, ni en aquellos con un pronóstico prolongado. Los médicos tendrán que tomar decisiones basadas en los efectos beneficiosos y perjudiciales percibidos de la HMA según las circunstancias de cada individuo, sin el beneficio de evidencia de calidad alta para guiarlos.

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Antecedentes: 

Muchas personas que reciben cuidados paliativos ven disminuida su ingesta oral durante su enfermedad y, sobre todo, al final de su vida. El manejo puede incluir la hidratación médicamente asistida (HMA) con el fin de mejorar la calidad de vida (CdV), prolongarla o ambas cosas. Esta es una versión actualizada de la revisión Cochrane original publicada en el número 2, 2008, y actualizada en febrero de 2011 y marzo de 2014.

Objetivos: 

Determinar la eficacia de la HMA en comparación con el placebo y la atención estándar en adultos que reciben cuidados paliativos sobre su CdV y supervivencia, y evaluar los posibles eventos adversos.

Métodos de búsqueda: 

Se realizaron búsquedas de estudios en el Registro Cochrane central de ensayos controlados (Cochrane Central Register of Controlled Trials; CENTRAL), MEDLINE, Embase, CINAHL, CANCERLIT, CareSearch, Dissertation Abstracts, Science Citation Index y en las listas de referencias de todos los estudios elegibles, libros de texto clave y revisiones sistemáticas previas. La fecha de la última búsqueda realizada en CENTRAL, MEDLINE y Embase fue el 17 de noviembre de 2022.

Criterios de selección: 

Se incluyeron todos los ensayos controlados aleatorizados (ECA) pertinentes de estudios de HMA en adultos de 18 años o más que reciben cuidados paliativos. Los criterios de inclusión fueron la comparación de HMA con placebo o atención estándar.

Obtención y análisis de los datos: 

Tres autores de la revisión revisaron de forma independiente los títulos y resúmenes para determinar su pertinencia, y dos autores de la revisión extrajeron los datos y realizaron la evaluación del riesgo de sesgo. El desenlace principal fue la CdV medida con escalas validadas; los desenlaces secundarios fueron la supervivencia y los eventos adversos. Para los desenlaces continuos se midió la media aritmética y la desviación estándar (DE), y se informó la diferencia de medias (DM) con un intervalo de confianza (IC) del 95% entre los grupos. Para los desenlaces dicotómicos se calculó y comparó la razón de riesgos (RR) con IC del 95% entre los grupos. Para los datos de tiempo transcurrido hasta el evento, se planificó calcular el tiempo de supervivencia desde la fecha de asignación al azar y calcular y expresar el efecto de la intervención como cociente de riesgos instantáneos (CRI). La certeza de la evidencia se evaluó mediante el método GRADE y se crearon dos tablas de resumen de los hallazgos. 

Resultados principales: 

Se identificó un nuevo estudio (200 participantes), para un total de cuatro estudios incluidos en esta actualización (422 participantes). Todos los participantes tuvieron un diagnóstico de cáncer avanzado. A excepción de 29 participantes que presentaban una neoplasia hematológica, todos los demás tenían cánceres de órganos sólidos. Dos estudios compararon la HMA con placebo y con la atención estándar. Hubo muy pocos estudios incluidos para evaluar diferentes subgrupos, como el tipo de participante, la intervención, el momento de la intervención y el lugar del estudio. Se consideró que un estudio tenía un alto riesgo de sesgo de realización y detección debido a la falta de cegamiento; por lo demás, el riesgo de sesgo se consideró bajo o incierto.

HMA comparada con placebo

Calidad de vida

Un estudio midió el cambio en la CdV a la semana utilizando la Functional Assessment of Cancer Therapy - General (FACT-G) (escala de 0 a 108; mayor puntuación = mejor CdV). No se dispuso de datos del otro estudio. No se sabe con certeza si la HMA mejora la CdV (DM 4,10; IC del 95%: -1,63 a 9,83; un estudio, 93 participantes, evidencia de certeza muy baja).

Supervivencia

Un estudio informó sobre la supervivencia desde la inscripción en el estudio hasta la última fecha de seguimiento o la muerte. No fue posible calcular el CRI. No se dispuso de datos del otro estudio. No se sabe con certeza si la HMA mejora la supervivencia (un estudio, 93 participantes, evidencia de certeza muy baja). 

Eventos adversos

Un estudio informó sobre la intensidad de los eventos adversos a los dos días con el uso de una escala de calificación numérica (escala de 0 a 10; menor puntuación = menor toxicidad). No se dispuso de datos del otro estudio. No se sabe con certeza si la HMA provoca eventos adversos (dolor en el sitio de inyección: DM 0,35; IC del 95%: -1,19 a 1,89; tumefacción en el sitio de inyección DM -0,59; IC del 95%: -1,40 a 0,22; un estudio, 49 participantes, evidencia de certeza muy baja). 

HMA en comparación con la atención estándar

Calidad de vida

No se dispuso de datos sobre la CdV.

Supervivencia

Un estudio midió la supervivencia desde la asignación al azar hasta la última fecha de seguimiento a los 14 días o la muerte. No se dispuso de datos del otro estudio. No está claro si la HMA mejora la supervivencia (CRI 0,36; IC del 95%: 0,22 a 0,59; un estudio, 200 participantes, evidencia de certeza muy baja). 

Eventos adversos

Dos estudios midieron los eventos adversos durante el seguimiento (rango: 2 a 14 días). No está claro que la HMA provoque eventos adversos (RR 11,62; IC del 95%: 1,62 a 83,41; dos estudios, 242 participantes, evidencia de certeza muy baja). 

Notas de traducción: 

La traducción de las revisiones Cochrane ha sido realizada bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad del Gobierno de España. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con comunica@cochrane.es.

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