El carcinoma escamocelular de la conjuntiva, un tumor de la fina membrana que cubre la parte blanca del ojo, es cada vez más frecuente, más agresivo y afecta a más personas jóvenes, especialmente a mujeres. Este patrón se asocia con la pandemia del VIH/SIDA, la exposición a la radiación solar y la infección con el virus del papiloma humano (HPV). Existen varias modalidades de tratamiento, pero la tasa de recidiva es alta y el resultado cosmético de la enfermedad tardía es antiestético (Figura 1). Cuando la enfermedad se propaga a las estructuras circundantes y al cerebro puede ocurrir la muerte. Esta revisión se realizó para evaluar los efectos de las intervenciones actuales. No se encontraron ensayos controlados aleatorizados de intervenciones para este cáncer. La práctica clínica actual parece basarse en series de casos e informes de casos. Estas son fuentes de evidencia débiles de la eficacia de un tratamiento. Es necesario realizar más ensayos controlados aleatorizados.
Implicaciones para la práctica:
La práctica clínica actual en el tratamiento del carcinoma de células escamosas de la conjuntiva se basa en una débil base de evidencia de series de casos e informes de casos.
Implicaciones para la investigación:
Se necesitan ensayos controlados aleatorizados del tratamiento de esta enfermedad en los lugares donde se produce con mayor frecuencia. También es necesario identificar las intervenciones preventivas. Las investigaciones sobre el VIH/SIDA no se han centrado en el tratamiento de este tumor.
El carcinoma de células escamosas de la conjuntiva se describe en la literatura oftálmica como un raro tumor ocular de crecimiento lento, que normalmente afecta a hombres de edad avanzada alrededor de los 70 años. Sin embargo, en África la enfermedad es diferente. La incidencia está en aumento de forma rápida, afectando a los jóvenes (alrededor de 35 años de edad) y, por lo general, a las mujeres. Es más agresivo, con un historial medio de tres meses en la presentación. Este patrón se relaciona con la coexistencia de la pandemia de VIH/SIDA, la alta exposición al HPV y la radiación solar en la región. Existen varias intervenciones, pero a pesar del tratamiento, hay una alta tasa de recidiva (hasta el 43%) y resultados cosméticos deficientes en la enfermedad tardía. Esta revisión se realizó para evaluar las intervenciones para el tratamiento del carcinoma escamocelular de la conjuntiva en pacientes infectados por el VIH.
Evaluar el efecto de las intervenciones para el tratamiento del carcinoma de células escamosas de la conjuntiva en pacientes infectados por el VIH sobre el control local, la recidiva, la muerte, el tiempo hasta la recidiva y los efectos adversos.
Mediante una estrategia de búsqueda sensible, se intentó identificar todos los ensayos relevantes, sin importar el idioma o el estado de publicación, de las siguientes bases de datos electrónicas; PubMedPubMed, EMBASE y la Cochrane Library. También se realizaron búsquedas en registros de ensayos clínicos; en la WHO International Clinical Trials Registry Platform (ICTRP) y en el US National Institutes of Health Clinicaltrials.gov. Se realizaron búsquedas en las actas de conferencias internacionales sobre el VIH/SIDA y cánceres relacionados con el SIDA en el AIDS Education Global Education System (AEGIS). Las búsquedas se realizaron entre enero y febrero de 2012.
Ensayos controlados aleatorizados (ECA) que incluyeran a pacientes infectados por el VIH con neoplasia escamosa de la superficie ocular.
Se revisaron de forma independiente los resultados de la búsqueda para seleccionar los estudios potencialmente pertinentes y recuperar los artículos completos. De forma independiente, se aplicaron los criterios de inclusión a los estudios potencialmente relevantes. No se identificaron estudios que cumplieran los criterios de selección.
No se identificaron ECA de intervenciones que se utilizan actualmente contra el carcinoma escamocelular de la conjuntiva en pacientes infectados por el VIH. Hay un ECA en curso en Kenya que se registró en julio de 2012.
La traducción y edición de las revisiones Cochrane han sido realizadas bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad del Gobierno español. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con Infoglobal Suport, cochrane@infoglobal-suport.com.