Suplementos energéticos y proteicos para personas de edad avanzada en riesgo de desnutrición

Se considera que una dieta adecuada es importante, generalmente con respecto a la preocupación para la salud que conlleva la obesidad. Sin embargo, la mayoría coincide en que el riesgo de subnutrición, más que el riesgo de sobrenutrición, es el principal motivo de preocupación cuando se trata de personas de edad avanzada, especialmente las que se encuentran hospitalizadas o internadas en instituciones de atención sanitaria. Se ha demostrado que la desnutrición tiene efectos importantes en la recuperación en un amplio rango de pacientes y enfermedades. La desnutrición se ha asociado fuertemente con deterioro de la respuesta inmunitaria, deterioro de las funciones musculares y respiratorias, retraso en la cicatrización de las heridas, incremento general de las complicaciones, prolongación de la rehabilitación y la estancia hospitalaria, e incremento de la mortalidad. La administración oral de suplementos proteicos y enérgicos es potencialmente más segura y más fácil que la alimentación enteral nasogástrica, por lo que resulta especialmente adecuada en las personas de edad avanzada y su uso está ampliamente establecido. Sin embargo, se pueden presentar problemas vinculados con la voluntad y la capacidad de las personas de edad avanzada de consumir suplementos orales, y es posible que éstos no se utilicen de manera eficaz. Aun en el caso de que se prescriban suplementos, puede que no siempre se administren o que se administren, pero no se consuman. Además del sabor, pueden ser importantes la composición y el momento de administración en relación con las comidas. También se debe procurar que se proporcionen comidas y refrigerios normales que satisfagan las necesidades de las personas de edad avanzada, así como asistencia en la alimentación si es necesario.

Se incluyeron 10 187 participantes asignados al azar en 62 ensayos. La duración máxima de la intervención fue 18 meses. Los autores de la revisión indican que la administración de suplementos parece producir un leve aunque mantenido aumento de peso. En esta revisión actualizada no hubo evidencia de un efecto beneficioso sobre la mortalidad general, pero es posible que exista un efecto beneficioso sobre la mortalidad en las personas con desnutrición. La administración de suplementos también puede reducir el número de complicaciones. La aceptación informada de la administración de suplementos varió entre los ensayos. Se informaron algunos efectos adversos como náuseas o diarrea. Sin embargo, hubo problemas con el diseño y la calidad de los estudios. Se necesitan más estudios para confirmar el efecto beneficioso sobre el número de complicaciones, para establecer si existe un efecto beneficioso sobre la mortalidad en las personas de edad avanzada y para aportar evidencia de si los suplementos proteicos y energéticos pueden mejorar la morbilidad y el estado funcional de las personas de edad avanzada débiles.

Conclusiones de los autores: 

La administración de suplementos produce un aumento de peso pequeño, pero constante, en las personas de edad avanzada. Es posible reducir la mortalidad en las personas de edad avanzada con desnutrición. También puede haber un efecto beneficioso sobre las complicaciones, lo que necesita ser confirmado. Sin embargo, esta revisión actualizada no encontró evidencia de una mejoría en el beneficio funcional o una reducción en la duración de la estancia hospitalaria con la administración de suplementos. Todavía se requieren datos adicionales de ensayos multicéntricos a gran escala.

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Antecedentes: 

La evidencia sobre la efectividad de la administración de suplementos nutricionales con contenido proteico y energético que se prescriben con frecuencia a las personas de edad avanzada es limitada. La desnutrición es más frecuente en este grupo etario y es posible que se produzca un deterioro del estado nutricional durante la enfermedad. Es importante establecer si los suplementos en la dieta son una manera efectiva de mejorar los resultados de las personas de edad avanzada en riesgo de desnutrición.

Objetivos: 

Esta revisión examina los ensayos para la mejoría en el estado nutricional y en los resultados clínicos cuando se proporcionaron proteínas y alimentos energéticos adicionales, generalmente en forma de suplementos nutricionales comerciales.

Métodos de búsqueda: 

Se hicieron búsquedas en The Cochrane Library, MEDLINE, EMBASE, Healthstar, CINAHL, BIOSIS, CAB abstracts. También se realizaron búsquedas manuales en revistas de nutrición y listas de referencias, y se estableció contacto con fabricantes de suplementos nutricionales.

Criterios de selección: 

Ensayos controlados aleatorizados y cuasialeatorizados de administración de suplementos proteicos y energéticos orales en personas de edad avanzada, con la excepción de los grupos en recuperación de un tratamiento para el cáncer o en cuidados intensivos.

Obtención y análisis de los datos: 

Dos autores de la revisión, de forma independiente, evaluaron los ensayos antes de la inclusión, extrajeron los datos y evaluaron la calidad de los ensayos. Cuando fue necesario, se estableció contacto con los autores de los ensayos para obtener información adicional.

Resultados principales: 

En la revisión se incluyeron 62 ensayos con 10 187 participantes asignados al azar. La duración máxima de la intervención fue 18 meses. La calidad de estudio de la mayoría de los ensayos fue baja. A partir del análisis de 42 ensayos, la diferencia de medias ponderada (DMP) agrupada para el porcentaje de cambio en el peso mostró un efecto beneficioso de la administración de suplementos del 2,2% (intervalo de confianza [IC] del 95%: 1,8 a 2,5). No hubo una reducción significativa en la mortalidad en el grupo de suplementos en comparación con los grupos control (riesgo relativo [RR] 0,92; IC: 0,81 a 1,04) de 42 ensayos. Los resultados de mortalidad fueron estadísticamente significativos cuando se limitaron a los ensayos en los que los participantes (n = 2461) se definieron como personas con desnutrición (RR 0,79; IC del 95%: 0,64 a 0,97).

El riesgo de complicaciones se redujo en 24 ensayos (RR 0,86; IC del 95%: 0,75 a 0,99). Pocos ensayos pudieron indicar algún efecto beneficioso funcional de la administración de suplementos. La DMP para la duración de la estancia hospitalaria de 12 ensayos tampoco mostró un efecto estadísticamente significativo (-0,8 días; IC del 95%: -2,8 a 1,3). Los efectos adversos incluyeron náuseas y diarrea.

Notas de traducción: 

La traducción y edición de las revisiones Cochrane han sido realizadas bajo la responsabilidad del Centro Cochrane Iberoamericano, gracias a la suscripción efectuada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad del Gobierno español. Si detecta algún problema con la traducción, por favor, contacte con Infoglobal Suport, cochrane@infoglobal-suport.com.

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