Aceite de pescado (n-3 u omega-3) para las embarazadas o las madres que lactan para prevenir las alergias en sus hijos pequeños

Los pescados y el aceite de pescado son las fuentes principales de ácidos grasos de cadena larga omega 3. Los suplementos dietéticos de ácidos grasos omega 3 marinos durante el embarazo pueden cambiar el sistema inmunológico del recién nacido antes de que se establezcan las respuestas alérgicas, en particular, en los que presentan una predisposición genética a la producción del anticuerpo inmunoglobulina E (IgE). Los individuos con alergias mediadas por IgE tienen signos y síntomas de enfermedad alérgica y una prueba cutánea (PC) positiva al alergeno.

La alergia es un problema importante de salud pública que representa una carga para los individuos, la sociedad y los costos de asistencia sanitaria. Las enfermedades alérgicas incluyen las alergias alimentarias, el eccema (dermatitis atópica), el asma o sibilancia y la fiebre del heno (rinitis alérgica). Muchas alergias en la infancia continúan hasta la edad adulta.

Las embarazadas, especialmente las de los países occidentales, no comen tanto pescado y las enfermedades alérgicas han aumentado durante el tiempo en el que las embarazadas han comido menos pescado. El recién nacido se nutre de su madre, por lo que la dieta de la madre es importante. La administración de suplementos a las mujeres con ácidos grasos omega 3 de origen marino puede ser importante para evitar que los niños desarrollen alergias.

En esta revisión de estudios controlados aleatorios, se evaluaron los efectos de agregar ácidos grasos omega 3 marinos a la dieta de las mujeres durante el embarazo o la lactancia sobre las enfermedades alérgicas en sus hijos. Se analizaron ocho ensayos que incluyeron a 3366 mujeres y 3175 niños. Las mujeres se asignaron al azar a recibir un suplemento de omega 3 marino (como cápsulas de aceite de pescado, o agregado a los alimentos) o ningún tratamiento durante el embarazo (cinco ensayos), durante la lactancia materna (dos ensayos) o durante el embarazo y la lactancia materna (un ensayo). En general, la calidad metodológica de los ensayos varió; solamente dos ensayos tuvieron bajo riesgo de sesgo.

En general, los resultados mostraron poco efecto de la administración de suplementos de omega 3 marino a la madre durante el embarazo o la lactancia para la reducción de la enfermedad alérgica de los niños. Sin embargo, hubo reducciones en algunos resultados como la alergia alimentaria y el eccema del recién nacido durante el primer año con la administración de suplementos de omega 3 marino a las mujeres con un recién nacido con alto riesgo de alergia. Actualmente, no hay pruebas suficientes para señalar que los suplementos de omega 3 de origen marino administrados durante el embarazo o la lactancia a las madres reducirán las alergias en sus hijos.

En cuanto a la seguridad de la madre y el niño, la administración de suplementos de ácidos grasos omega 3 de origen marino durante el embarazo no mostró un aumento del riesgo de hemorragia excesiva después del parto (hemorragia posparto) o de infecciones en la primera infancia.

Conclusiones de los autores: 

En general, hay pruebas limitadas para apoyar la administración de suplementos de AGPICL n-3 a las madres durante el embarazo o la lactancia para reducir la enfermedad alérgica en los niños. Se observaron pocas diferencias en la enfermedad alérgica en la infancia entre las mujeres a las que se les administraron suplementos con AGPICL n-3 y a las que no se les administraron.

Leer el resumen completo…
Antecedentes: 

Las alergias se han vuelto más prevalentes a nivel global durante los últimos 20 años. El consumo dietético de los ácidos grasos poliinsaturados de cadena larga (AGPICL) n-3 (u omega 3) ha disminuido durante el mismo período. Lo anterior, junto con la función conocida de los AGPICL n-3 al inhibir la inflamación, ha dado lugar a la especulación de que los AGPICL n-3 pueden prevenir la aparición de alergias. La administración de suplementos dietéticos de ácidos grasos n-3 puede cambiar el sistema inmunológico en desarrollo del recién nacido antes de que se establezcan las respuestas alérgicas, en particular, en los que presentan una predisposición genética a la producción del anticuerpo inmunoglobulina E (IgE). Los individuos con alergias mediadas por IgE tienen signos y síntomas de enfermedad alérgica y una prueba cutánea (PC) positiva al alergeno.

Objetivos: 

Evaluar el efecto de la administración de suplementos de AGPICL n-3 en mujeres embarazadas o que lactan sobre resultados de la alergia (alergia alimentaria, dermatitis atópica [eccema], rinitis alérgica [fiebre del heno] y asma / sibilancia) en sus niños.

Métodos de búsqueda: 

Se hicieron búsquedas en el registro de ensayos del Grupo Cochrane de Embarazo y Parto (Cochrane Pregnancy and Childbirth Group) (6 agosto 2014), PubMed (1966 hasta el 1 agosto 2014), CINAHL vía EBSCOhost (1984 hasta el 1 agosto 2014), Scopus (1995 hasta el 1 agosto 2014), Web of Knowledge (1864 hasta el 1 agosto 2014), en ClinicalTrials.gov (1 agosto 2014) y en listas de referencias de estudios recuperados.

Criterios de selección: 

Se incluyeron los ensayos controlados aleatorios (ECA) que evaluaron el efecto de la administración de suplementos de AGPICL n-3 a mujeres embarazadas o que lactan (en comparación con placebo o ningún tratamiento) sobre los resultados de la alergia en los lactantes o los niños. No fueron elegibles para la inclusión los ensayos que utilizaron un diseño cruzado (crossover) ni los ensayos que examinaron resultados bioquímicos solamente.

Obtención y análisis de los datos: 

Dos autores de la revisión evaluaron de forma independiente la elegibilidad y la calidad de los ensayos y realizaron la extracción de datos. Cuando los revisores también fueron investigadores en los ensayos seleccionados, un revisor independiente evaluó la calidad de los ensayos y realizó la extracción de los datos.

Resultados principales: 

Se incluyeron en la revisión ocho ensayos con 3366 mujeres y 3175 niños. En estos ensayos, a las mujeres se les administraron suplementos de AGPICL n-3 durante el embarazo (cinco ensayos), la lactancia (dos ensayos) o durante el embarazo y la lactancia (un ensayo). Todos los ensayos asignaron al azar a las mujeres a suplemento de AGPICL n-3 o a un grupo control. El riesgo de sesgo varió en los ocho ensayos incluidos en esta revisión, y dos ensayos tuvieron bajo riesgo de selección, realización y deserción.

La administración de suplementos de AGPICL N-3 mostró una reducción clara del resultado primario de cualquier alergia (diagnosticada médicamente mediada por IgE) en los niños con entre 12 y 36 meses de edad (cociente de riesgos [CR] 0,66; intervalo de confianza [IC] del 95%: 0,44 a 0,98; dos ECA; 823 niños), pero no más allá de los 36 meses (CR 0,86; IC del 95%: 0,61 a 1,20; un ECA, 706 niños). Para cualquier alergia (diagnosticada médicamente mediada por IgE o informada por los padres), no se observaron diferencias claras en los niños entre 12 y 36 meses de edad (CR 0,89; IC del 95%: 0,71 a 1,11; dos ECA, 823 niños) o más allá de los 36 meses de edad (CR 0,96; IC del 95%: 0,84 a 1,09; tres ECA, 1765 niños).

En los resultados secundarios de alergias específicas, no hubo diferencias claras en las alergias alimentarias a los 12 a 36 meses y más allá de los 36 meses, pero se observó una reducción clara en los niños en sus primeros 12 meses con los AGPICL n-3 (para la diagnosticada médicamente mediada por IgE y para la diagnosticada médicamente mediada por IgE o informada por los padres). Hubo una reducción clara del eccema diagnosticado médicamente mediado por IgE con los AGPICL n-3 en los niños entre 12 y 36 meses de edad, pero no en cualquier otro punto temporal para la diagnosticada médicamente mediada por IgE y la diagnosticada médicamente mediada por IgE o informada por los padres. No se observaron diferencias claras para la rinitis alérgica o el asma / sibilancia en cualquier punto temporal para la diagnosticada médicamente mediada por IgE y la diagnosticada médicamente mediada por IgE o informada por los padres.

Hubo una reducción clara en la sensibilización de los niños al huevo y en la sensibilización a cualquier alergeno entre 12 y 36 meses de edad cuando a las madres se les administraron suplementos de AGPICL n-3.

En cuanto a la seguridad para la madre y el niño, la administración de suplementos de AGPICL n-3 durante el embarazo no mostró un mayor riesgo de hemorragia posparto o infecciones en la primera infancia.

Tools
Information